Mujeres XXL sobre la pasarela ¿tendencia o reivindicación?

   De manera un poco tímida, luego reivindicativa, y ahora cada vez más común, las modelos XXL, esas que representan una belleza real de la mujer con curvas, han venido para convertirse en la nueva sensación de las grandes pasarelas internacionales de medio mundo. Muchos ven en esta nueva 'moda' un acto de rebeldía o una nueva forma de arriesgar de ciertos diseñadores, mientras otros ven en estas modelos de tallas grandes un nuevo icono de belleza real que ha venido para quedarse... y para reinar.

   "Las mujeres con curvas han empezado a ganar terreno en la moda, tras hacerlo en la música o en el cine. ¿Es una tendencia fugaz o un cambio que perdurará en el tiempo?" Esta es la pregunta que se hace la revista Mujer Hoy en una extenso artículo (El triunfo de las modelos 'reales') que analiza una de las nuevas tendencias sobre la pasarela que, en los últimos meses no sólo está ganando en importancia, sino también en aceptación, incluso entre los más escépticos.

   Crystal Renn, Sophie Dahl (en la imagen) o Tara Lynn se han convertido en auténticos iconos de la moda XXL y son de las modelos más demandadas por los más prestigiosos diseñadores para lucir sus últimas creaciones. ¿Una simple forma de llamar la atención o es que también entre los que apostaban por las mujeres hiperdelgadas están ganando puestos los kilos y las curvas?

   Hace unos años podíamos ver a varias modelos de talla grandes en la Campaña por la Belleza real de la marca de productos de belleza Dove, en la que no sólo apostaba, sino también arriesgaba mucho, homenajeando a ese sector de la sociedad que nunca antes se había visto reflejado en anuncios de belleza o en campañas de publicidad de grandes marcas de moda.

   Y es que, según publica Mujer Hoy en su artículo, "la talla media de las españolas es la 42, lo que viene indicar que tan normal es la 40 como la 44". Sin embargo, hasta entonces ni la talla 44, ni la 42, ni tan siquiera la 40 habían tenido cabida en los anuncios de televisión o impresos.

   Lo cierto es que las modelos que solemos ver sobre la pasarela, en las que deberíamos fijarnos para seguir las nuevas tendencias, poco tienen que ver con el modelo de mujer real que solemos ver en la calle o haciendo la compra en el súper.

EL CINE, LA MÚSICA Y LA MODA, PROMOTORES DEL IDEAL DE MUJER

   Donde sí había sido aceptado -e incluso venerado- un modelo de mujer curvilíneo y con algún que otro kilo de más, ha sido siempre en el cine, la música y la moda. "Las tres grandes locomotoras que proponen el ideal de mujer son la música, el cine y la moda", explica el sociólogo Pedro Mansilla en Mujer Hoy. 

   Las curvas de Beyoncé, el trasero de Jennifer López o la poderosa delantera de la protagonista de Mad Men Christina Hendricks, son algunos de los atributos más deseados por hombres y mujeres. Sin embargo, mientras en la vida real no está tan bien aceptado que las mujeres luzcan con orgullo sus kilos de más, en el cine y la música y el mundo del espectáculo en general, parece que todo vale.

   Ahora parece que poco a poco, este ideal de mujer real -con curvas, pecho y algún que otro kilo de más- se está imponiendo poco a poco, y no sólo a nivel internacional, sino también en nuestro país. "Marcas como Adolfo Domínguez, Pronovias o Venca demandan cada vez más chicas con las que se puedan sentir identificadas sus clientes", explica Mireia Verdú directora de Francina Models para el artículo de Mujer Hoy.

UNA TENDENCIA ¿PARA QUEDARSE?

   Ante esta creciente tendencia de recurrir a modelos de tallas grandes para mostrar diseños que antes sólo lucía una mujer de la talla 36 sobre la pasarela, queda preguntarse si estamos antes una tendencia fugaz o si por el contrario la 'Mujer XXL' ha aterrizado sobre las pasarelas para quedarse.

   Uno que también se atrevió a arriesgar con un modelo de mujer distinto el impuesto -o al normal- fue el modisto español Juan Duyos. En la pasada edición de la Cibeles Madrid Fashion Week, el diseñador saco a la pasarela, para sorpresa de todos, a cuatro mujeres de entre 50 y 80 años.

   Una apuesta muy arriesgada que, para sorpresa de muchos, tuvo una gran aceptación y acogida entre el público -yo estuve ahí para presenciarlo-, convirtiéndose en una de las anécdotas más recordadas y en una de las grandes sensaciones de la 52 edición de la pasarela Cibeles, de la que se estuvo hablando incluso semanas después de la edición.

   Ante esta pequeña 'osadía' del modisto, y retomando la tendencia de las mujeres de tallas grandes sobre la pasarela, desde aquí nos preguntamos, ¿el estereotipo de las 'mujeres XXL' es sólo una tendencia fugaz? ¿o simplemente se trata de arriesgar sobre la pasarela? ¿Se trata de una forma de reivindicación de la belleza real? o ¿es un acto de rebeldía de los diseñadores? Nosotros apostamos por que sea un cambio que perdure en el tiempo.

15 minutos en el estudio de Alma Aguilar

   Llevaba soñando con este momento desde que la vi desfilar por primera vez sobre la Cibeles Madrid Fashion Week y por fin he visto mi sueño hecho realidad... he conseguido colarme en el estudio de Alma Aguilar.

   Hace unas semanas os adelanté que estaba ayudando a una amiga en la busca de su vestido de novia y por ello le cogí una cita en el taller de una de -para mi gusto- una de las mejores diseñdoras del panorama nacional, Alma Aguilar.

   Ahi quedamos, a las 5 de la tarde, justo después de comer, y como si fuera yo quien iba en busca del vestido con el que me despediría para siempre de mi soltería, los nervios se apoderaron de mí, más que de la propia protagonista.

   Ibamos tres: la novia, una amiga y yo. Nos abrío una chcia encantadora pidiéndonos perdón porque aún no habían abierto la tienda -eran las 16:58h y ya sabemos todos como es esto de la puntualidad española- y nos dejó pasar a una sala en la que colgaban algunos de los maravillosos vestidos que ya había visto antes en su web.



    En los 10 minutos que nos dejó solas en la sala atendiendo a una mujer que también se había adelantado a la apertura del estudio, aproveché para tocar algunos de los vestido que meses antes había visto desfilar sobre la pasarela de la Cibeles Madrid Fashion Week.

   Por fin me ví ahí, entre algunos de los diseños que jamás pensé que podría llegar a tocar a tan solo unos centímetros, todos para mí, sonriendo y posando en las perchas que adornaban la sala de espera.

   Y como los vestidos parecían posar para mí, pues yo cogí la cámara y me dediqué a sacarles fotos como una loca... Nunca sabré si tendré la posibilidad de volver  a entrar en el estudio de Alma...

      Pues bien, 10 minutos después de dejarnos solas entre tanto vestido de pasarela, una chica encantadora se sentó con n ostras para preguntar a la futura novia cómo se imaginaba el vestido del día más importante de su vida.

   Nunca había ido en busca de un vestido de novia, y lo cierto es que fue interesante. Tras resumir un poco cómo iba a ser la ceremonia -hora, lugar, fecha...- la chica fue parte por parte, preguntando a la futura novia cómo se imaginaba el escote, el talle y la falda de su vestido.

   Tras más de media hora escribiedno hasta el mínimo detalle de las ideas de mi amiga, la chica nos explicó que en unas dos semanas tendía listos los bocetos para presentárnoslos y llegar a una idea final para el vestido de boda....

   La semana que viene nos esperan los bocetos y estoy como loca por ver cómo se ha imaginado Alma el traje de novia de mi amiga... 

Hasta entonces, os dejo con una foto más, para os hagáis una idea de cómo es su estudio. Por cierto, nos confesó que los vestido que tiene expuestos en el estudio no son más que una mera "decoración, para que todo esto no parezca tan vacío", pero que "todos los vestidos de novia se hacen personalizados".  

   

  

    



Anne Hathaway, Olivia Wilde y Angelina Jolie deslumbran en los Globos de Oro

  

  La entrega de los Globos de Oro, la gala que sirve como preludio para ver qué ocurrirá en los Oscar -los premios más importantes de la industria cinematográfica- reunieron este domingo a algunas de las estellas más importantes del momento sobre una improvisada alfombra roja en pleno centro de Los Angeles.

   En esta 68ª edición de los Golden Globes pudimos ver desfilar a nuestras actrices preferidas como si de auténticas modelos de pasarela se trataran, sacando a pasear sus mejores galas en un evento para el que se han preparado hasta el más mínimo detalle.

  Como ya viene siendo tradición si analizamos las alfombras rojas más importantes de los últimos años, el nude en todas sus versiones fue uno de los colores preferidos de la noche, elegidos por actrices de la talla de Scarlett Johansson -muy guapa y apostando por lo seguro con un vestido firmado por Elie Saab repleto de pailletes-, Leighton Meester -espectacular, vestida con un diseño vintage de gasa, manga larga y hombreras drapeadas de Burberry Prorsum PreFall 2011- o Sandra Bullock, con nuevo look y un diseño de Jenny Packman.

   El nude compartió protagonismo con otros dos complementos indispensables en la pasada entrega de los Globos de Oro: nuestras famosas han vuelto a poner de moda el flequillo y, además, se resisten a desprenderse de las tan recurridas pailletes y de los brillos para grandes ocasiones como las de este domingo.

   Si ya hemos comentado los brillantes looks de Scarlett Johansson y Sandra Bullock, éstas no fueron las únicas actrices que se decantaron por las lentejuelas y los brillos para deslumbrar en una de las noches más importantes para la industria cinematográfica.

   Anne Hathaway y Olivia Wilde fueron dos de las indiscutibles reinas de la noche junto Angelina Jolie quien, además de enfundarse un maravilloso traje repleto de pailletes firmado por Versace -su diseñador fetiche-, se arriesgó, raro en ella, y dejó aparcado su tan socorrido negro para decantarse por un look verde botella.

   Del brazo de su inseparable Brad, quien sigue empeñándose en lucir gafas de sol en una gala de noche, cosa que, aparte de absurda, me parece bastante hortera (del anillo mejor ni hablamos), la protagonista de The Tourist, Angelina también apostó por lo seguro, se dejó de estridencias y derrochó el glamour que la ha llevado a ser elegida como una de las mujeres mejor vestidas por la revista Vogue.

   Junto a ella, una de las grandes protagonistas de la noche fue, sin duda alguna, la actriz Anne Hathway gracias a su magnífico Armani Privé de lentejuelas con un especacular escote en la espalda, vestido con el que la artista no sólo dejó con la boca abierta a más de uno, sino que también presumió de cuerpo de infarto.



    Otra de las más elegantes de la noche fue una renovada Olivia Wilde con cambio de look incluido -se ha cortado flequillo, al igual que Sandra Bullock-, quien eligió uno de los vestidos más espectaculares de la gala.

    Firmado por Marchesa, la actriz huyó del nude e hizo de su vestido negro de escote corazon y amplísma falda abullonada de tul, uno de los looks más comentados de la noche.

    Sin embargo, y pese a la espectacularidad de su vestido, ya hemos podido ver a otras actrices en anteriores ocasiones luciendo unas creaciones muy similares y no menos elegantes al Marchesa de Olivia.

  Concretamente pudimos ver a Cameron Díaz con un Oscar de la Renta en oro en los Oscar del año pasado, mientras Jennifer Lopez aparecía con un impresionante vestido de lentejuelas plateadas de Alta Costura primavera-verano 2010, del diseñador libanés Zuhair Murad en la gala Costume Institute 2010.

   Menos acertados fueron los zapatos que Olivia se calzó con el vestido. Si no era llamativo ya de por sí, tanto por la falda como por las lentejuelas, la actriz lo combinó con unos exageradísimos Louboutin dorados llenos de pinchos. Menos mal que el largo de su vestido los dejó bien escondidos...

    Otros de los colores elegidos por nuestras actrices fueron el blanco y el negro, mientras que sólo unas pocas se atrevieron a darle unos guiños de color al evento. Es el caso de January Jones, nueva embajadora de Versace, que fue vestida de rojo pasión, súper sexy y con un escote que recordaba mucho al Versace que lució Gisèle Bündchen con Tom Brady en la gala Costume Institute de 2008.

   Por lo demás, llamó especialmente la atención una espectacular Eva Longoria vestida de negro de Zac Posen, en contraposición a una excesivamente delgada Megan Fox y a una elegante Jennifer Lopez, ambas en crudo y vestidas por Armani y Zuhair Murad, respectivamente.

  

  
     

  

  

  

15 minutos eligiendo vestidos de novia... (con Alma Aguilar)

Y no, yo no me caso... al menos de momento.

Las que sí han decidido despedirse para siempre de su soltería son dos de mis mejores amigas ...¡¡con tres semanas de diferencia entre boda y boda!!

Genial. Perfecto. Si me alegro un montón y no veo el momento en que llegue EL DÍA para ambas... lo que pasa es que una de las dos bodas -concretamente la segunda- me pilló un tanto de sorpresa...(la protagonista lo sabe).

Eso no sólo significa para mí que la 'operación bikini' empieza desde ya -de hecho ya ha empezado-, sino también supone comprar dos vestidos (uno ya lo tengo... es maravilloso y me he dejado medio sueldo...), porque en las bodas de amigas no se repite vestido.....................

Además, y aunque no tengo ni idea de cómo será la ceremonia en sí, sí me imagino dos bodas completamente distintas. De hecho, mientras que la primera amiga que se casa -llamémosla Alma- probablemente tiene una cierta idea del vestido que lucirá el día más feliz de su vida, la segunda, Carmina, no tiene ni idea.

   De hecho, Carmina vive fuera y esta semana ha aterrizado en Madrid con el firme propósito y con la idea de que yo le haga de asistente personal y estilista. LOVE IT. Aquí estoy, pongámonos manos a la obra.

   EL GRAN PROBLEMA: Carmina no tiene ni idea de cómo se imagina su vestido de novia. EL PUNTO POSITIVO: Sabe lo que NO quiere.

   Bien, empecemos. Será una boda un tanto hippie, al aire libre.. una boda de ensueño. (Antes de nada, he de reconocer que jamás me había puesto manos a la obra con vestidos de novia, así que seguro que se convierte en un reto interesante, cuanto menos...)

   Primero me propuse buscar entre los grandes diseñadores nacionales empezando por Lorenzo Caprile, que me fascina, así como por otras que desde hace apenas unas temporadas podemos ver desfilar en Cibeles y sin embargo, en poco tiempo, se han convertido en mis favoritas: la catalana Teresa Helbig y Alma Aguilar.

   Sin embargo, entre estas dos diseñadoras de lujo, me quedo sin duda alguna con los vestidos de inspiración romántico de Alma Aguilar, perfectos para una boda de verano al aire libre. 

   Unos maravillosos vestidos de inspiración bohemia y cierta influencia griega perfectos para novias románticas y secillas,que no quieren renunciar a un vestido de ensueño, evitando las pomposidades y esas abullonadas faldas que tan de moda están útimamente. Aquí os dejo mis primeras opciones, pero esto continuará...

15 minutos de rebajas en ZARA

  Vale, sí... reconozco que también estuve más de 15 minutos...

Gran parte de ellos en la cola, esperando para pagar las dos cosas qué conseguí rescatar de los montones de ropa que se acumulaban a los lados del suelo, todo hay que decir...

   Locura, empujones y masas de gente comprando compulsivamente en unas rebajas más bien ridículas... eso fue lo que nos esperaba a las más de 100 personas que esperábamos ansiosas a las 10 de la mañana en la puerta del ZARA de la calle Serrano.

   Vale que yo esto ociosa desde que mi queria empresa decidiera no renovarme el contrato, pero de verdad jamás pensé que habría tanta gente en mi misma situación... (aunque sea el mal de muchos y el respectivo consuelo de tontos, admito que me consuela...)

  En fín, sea como fuere, yo iba a tiro hecho a por las tres cosas que había fichado días antes. Cuál es mi sorpresa que cuando me dispogo a subir a la segunda planta a por los botines que había fichado días atrás, los dependientes se habían encargado de descolocarme mis futuras adquisiciones para recolocarlas a su antojo...

   Como si de una auténtica aventura se tratara -yo en el papel de Indiana Jones, por supuesto- tuve que esquivar los obstáculos que se me venían encima: señoras locas por encontrar el otro pie de un zapato, bolsos que volaban por los aires, chicas corriendo de un lado al otro poseidas por el espíritu de las compras complusivas... un paraiso en toda regla.

   Una experiencia cuanto menos interesante, aunque nada aconsejable y que -por descontado- no pienso repetir. Sí, ZARA está de rebajas, pero de rebajas ridículas y para colmo ni por asomo cumpliendo la promesa que anuncian en sus carteles del escaparate con el 50 % de descuento.

   Al final encontré los botines -en una talla más, pero al ser de cordones, valen-, pero admito que no me metí en la piel de todas aquelas mujees y chicas que fueron a gastarse los euros que el día antes les habían dejado los Reyes.

  Demasiada gente, poca rebaja, muchas piezas de colecciones anteriores y, para colmo, un guardia de seguridad que se rió de todas nosotras en nuestra cara... tan contento: "Venga señoras, entren rápido, que se acaba el género".

 En un momento de la mañana desistí de mi aventura de rebajas y encontré refugio entre dos columnas en una esquina desierta, desde la cual me limité a observar el panorama. Sentí miedo, lo admito.

   Sin embargo, poco después, y mientras me perdía en mis pensamientos, una solitaria camiseta consiguió llamar mi atención. Mientras otras intentaban abrirse paso entre la muchedumbre, cegadas por unas rebajas ridículas, una solitaria camiseta blanca me miraba coqueta y afirmaba muy orgullosa: "Yo no busco, encuentro". Sí claro...

   Todo ello en francés ("Je ne cherche pas, je trouve"), para darle un toque más chic a este día de locura. Yo he buscado y he encontrado de milagro. Luego me he comido una cola de una hora en la que casi muero de calor. Y para más INRI, las rebajas eran como de broma. Me están vacilando, claramente. Cogí mis bolsas y me fui. Hasta nunca.